martes, 3 de febrero de 2015

Homo Sapiens


Homo Sapiens


Podemos suponer que nuestra especie, Homo sapiens, se originó en algún lugar de África hace alrededor de 150.000 años. Especies más arcaicas parecen haber continuado durante un tiempo. La especie se expandió relativamente lento, llegando a Australia hace 40.000 años. En Europa, la especie parece haber entrado más lentamente, entre 40.000 y 35.000 años, por España y por el este.
Las herramientas de nuestra especie se asocian en cuatro periodos. El primero de ellos es el Auriñaciense, que apareció hace 40.000 años y persistió hasta hace 28.000, está marcado por una explosión de creatividad. Aparecen el arte, la decoración de objetos, la decoración personal, la música (en forma de instrumentos).

Este periodo es seguido por el Gravetiano, entre los 28.000 y los 22.000 o 18.000 años. Es aquí cuando aparecen las agujas de coser, aparte de cuchillos más pequeños y afilados.

Seguidamente aparece el Solutreano, entre los 22.000 y los 18.000 años. Este periodo se caracteriza por los cuchillos "hoja de laurel", llamados así por su forma. Algunos de estos cuchillos son tan delgados y delicados que no es posible imaginar que hayan tenido un uso práctico.

Finalmente, llegamos al Magdaleniano, el que se extiende de los 18.000 a 10.000 años atrás. Con este periodo termina el paleolítico superior. Encontramos un trabajo sofisticado del hueso y las astas, junto con abundantes "microlitos", pequeñas herramientas de piedra que eran seguramente puestas en mangos. Encontramos también enterramientos, siendo mucho más complejos que los de los neandertales.

lunes, 2 de febrero de 2015






HECHO POR:

LUCIA.

ALONSO.

 LORENA.

 Y

 DIEGO:


Homo Erectus 2.0









PRIMERA ESPECIE QUE SALE DE ÁFICA



Hombre Neandertal 2.0






PARECIDO AL HOMO SAPIENS  PERO CON RASGOS MAS TOSCOS

Homo habilis 2.0






VIVIÓ HACE UNOS DOS MILLONES DE AÑOS

Australophitecus 2.0





PARECIDO AL CHIMPANCÉ PERO ANDABA A DOS PATAS 

El hombre de neandertal

El hombre de neandertal



Ahora sabemos que el Hombre de neandertal no es, como se creía, un antepasado directo nuestro, sino que eran una rama paralela en el árbol evolutivo. Una rama que guarda muchos secretos. Por ejemplo, no sabemos por qué se extinguieron, no sabemos si poseían un lenguaje.


Los neandertales eran más bajos que nosotros, pero tenían una musculatura extremadamente fuerte. Sus esqueletos eran masivos, y tienen prominentes marcas musculares. Su anatomía en general está hecha para el territorio no muy agradable en el que vivían. Incluso los niños eran más musculosos que los niños actuales. La característica facial que más llama la atención es su nariz, que es grande y bulbosa. Esta adaptación les servía para calentar y humidificar el aire que inhalaban, y para perder calor con el que exhalaban, protegiéndose así de sufrir de sobrecalentamiento.

En vez de utilizar un tipo de herramienta multipropósito, como el hacha de mano acheuliana, crearon diferentes tipos de herramientas según la necesidad. Tenían diferentes herramientas para cortar carne, raspar, trabajar la madera, etc. Algunas puntas tienen signos de haber sido parte de flechas. Además, los Neandertales deben haber sido expertos en usar la piel de animales muertos y convertirla en cuero. Algunos resultados experimentales nos conducen a pensar que comían grandes cantidades de carne. También manejaban el uso del fuego, el que probablemente podían crear por sus propios medios.
Hacia el final de la era de los neandertales, vemos un avance en las técnicas y pasamos a una etapa llamada Chatelperroniana. Este avance se supone debido a copias de los neandertales de las técnicas sapiens. Ahora encontramos aparte de herramientas, objetos tales como pendientes, dientes de animales agujereados, y lo que parecen ser los cimientos de una cabaña.

El Homo Erectus


El homo erectus

Los Homo erectus son los primeros viajeros intercontinentales. Desde África se dispersan a través de Asia Menor y el Próximo Oriente, llegando por un lado hasta España y por el otro hasta cerca de Pekín, en el norte de China, y hasta la isla de Java, en Indonesia. Los fósiles más antiguos de Atapuerca, cerca de Burgos, que tienen 800.000 años, son descendientes de ellos. Los Homo erectus más antiguos de Europa se han encontrado en Georgia, donde vivían hace 1,6 millones de años.

Además de fabricar hachas de mano de piedra, el Homo erectus también dejó los primeros restos de viviendas construidas, de objetos de madera tallada, la primera lanza de madera y el recipiente más primitivo, un cuenco de madera. Pero su mayor avance cultural fue que aprendió a manejar el fuego. Se han encontrado los primeros indicios de su utilización en China, hace 300 mil años y se atribuyen al "hombre de Pekín", una versión del Homo erectus.


El descubrimiento de útiles o herramientas fosilizadas y esqueletos de grandes mamíferos cerca de los fósiles de Homo erectus (hombre erguido) sugiere que estos ancestros humanos llevaron una existencia más compleja que las especies anteriores. A pesar de que su estructura anatómica se parece a la de los seres humanos actuales, los antropólogos han encontrado que el cerebro humano sufrió muchos cambios durante la evolución de una especie a otra.
El ejemplar más antiguo tiene 1 millón de años y el más joven tan solo de 100.000 y corresponden a Java (Asia). 

El homo habilis

El homo habilis


Homo habilis es la especie más antigua del género Homo. Vivió hace 2,5 millones de años aproximadamente. Su nombre significa "hombre habilidoso" y hace referencia al hallazgo de instrumentos de piedra confeccionados por éste.

Las características físicas del Homo Habilis son:

- su altura rondaba los 1,5 metros y pesaba  kilos aproximadamente

- la posición bípeda se desarrolló en las hembras, provocó una reducción de la pelvis y tuvo como consecuencia el adelanto de los partos.

- su característica más notable fue el aumento de la capacidad craneal, que superó los 650 cm.

- la cabeza del fémur es más grande pero corta y redonda, lo que le permitía al individuo una mayor movilidad por parte de las piernas.

Fueron los primeros en tallar piedras por los dos lados. Eran carroñeros, esto se debía al aprendizaje del uso de los utensilios de piedra, ya que con éstos podían cortas las pieles de animales algo más gruesas. también utilizaban estos instrumentos para cortar plantas y triturar productos vegetales duros.

Para tallar piedras agarraban con una mano una piedra más dura que la que querían tallar y en la otra la piedra a que se quería dar forma. Golpeaban la piedra y de este modo se iba creando una especie de punta que servía para cortar y clavar.

La habilidad del Homo Habilis para tallar piedras es un hecho importante que benefició considerablemente a nuestra especie y para la defensa propia.

domingo, 1 de febrero de 2015

El Austrolophitecus

El Austrolophitecus



El Austrolophitecus en la historia de la evolución del hombre es verdaderamente importante.

El Austrolophitecus es la primera especie que se separó de los grandes monos e inició la carrera evolutiva del hombre actual hace aproximadamente 4 millones de años en África.

El Austrolophitecus fue el primero en caminar de una manera bípeda, tal y como lo hacemos nosotros. No como los grandes monos, que aunque alguna vez se pongan sobre sus dos patas traseras, se desplazan con sus cuatro patas. Y este pequeño detalle de postura fue el primer escalón que inició la carrera evolutiva.

Los Austrolophitecus según su antigüedad se clasifican en diferentes subespecies: Austrolophitecus Anamensis, Afarensis, Africanus, Garhi y Sediba. Muy parecidos entre sí y con pequeñas diferencias: los molares se hacían planos, o aumenta un poco su capacidad craneal, mayor peso...

Al igual que los chimpancés, los Austrolophitecus eran fructívoros, comían fruta que cogían de los árboles, además, cazaban ciertos animales pequeños que les servían como aporte extra de proteínas en sus dietas. Algo necesario para desarrollar el cerebro. Pero la diferencia entre los Austrolophitecus y los chimpancés fue que al poder caminar de una manera bípeda empezaron a salir de la selva a las sabanas de África para, caminando, recorrer largas distancias y recolectar su alimento.